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Enviado por joaquinvera@verabril el

La emoción y alegría del Encuentro brilla en el Domingo de Resurrección

· El Cristo Resucitado, la Virgen de la Victoria y San Juan Evangelista han protagonizado hoy 20 de abril su tradicional reunión a las puertas de la iglesia de Nuestra Señora de la Salceda antes de la procesión del Resucitado

 

La emoción y alegría del Encuentro brilla en el Domingo de Resurrección

20/04/25 – El Cristo Resucitado viniendo desde la ermita del barrio de la Cruz a hombros de sus costaleros para salir al paso de su Madre, la Virgen de la Victoria, ante la atenta mirada de San Juan Evangelista. El Encuentro de Domingo de Resurrección de Las Torres de Cotillas. Un año más -y van 45- los torreños y visitantes han podido disfrutar hoy 20 de abril de la esperada y tradicional reunión de estas tres imágenes, que como manda la tradición han sido “bailadas” a las puertas de la iglesia de Nuestra Señora de la Salceda.

Antes, como anticipo y con la plaza llena, salían del templo torreño el trono infantil de La Cruz y la imagen de San Miguel Arcángel. Después, llegaba la procesión de Resurrección, que ha vuelto a unir en su itinerario a las ocho cofradías pasionarias locales. 

Ante el multitudinario público desfilaban los pasos del Cristo Resucitado, la Aparición a María Magdalena y el de la Duda de Santo Tomás, el trono infantil del Niño Jesús y, como colofón, La Ascensión. Todo ello regado con una cariñosa “caramelada”, la lluvia de caramelos que siempre aporta su dulzura a la Semana Santa torreña. Y, ante la otra lluvia que ha querido aguar la fiesta, la procesión ha acortado su recorrido para poder concluir. 

 

Con el demonio encadenado

En la comitiva de autoridades, entre otras, han desfilado la presidenta del Cabildo Superior de Cofradías, Ángeles Sola; el alcalde Pedro José Noguera, junto a otros miembros de la corporación municipal; el consejero de Salud, Juan José Pedreño; el pregonero de esta Semana Santa, Pedro Jesús Pérez; su homóloga infantil, Rosalía Dólera; y el Nazareno del Año, Antonio Molina.

La nota curiosa y divertida la ha puesto de nuevo el Demonio que, aunque vencido y encadenado, se ha dedicado en el recorrido de la procesión a asustar a pequeños y no tan pequeños.

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